domingo, 20 de mayo de 2012

Carlos Slim Helú


Carlos Slim  Helú

El aconsejar es un oficio  tan común que lo usan muchos y lo  saben hacer muy pocos

¿Qué es el Éxito?

 Para todos aquellos que han  alcanzado el éxito y para quienes estamos  en el camino para alcanzarlo.
En la entrevista sobre el  éxito que le hace Issac Lee, de  la revista PODER, al Destacado Mexicano 
Carlos Slim  Helú, este dice:

“Yo creo que el éxito no está en lo económico.
Yo creo que una persona no  es de éxito porque le va bien en  los negocios o le va bien profesionalmente  o saca 10 en la escuela.

Creo que eso es lo que  menos vale. Lo que vale es tener  los pies en la tierra, el concepto  de la familia, los amigos (Pero los  verdaderos amigos, ese que cuando te recuerda  te llama, cuando sabe que estas mal   en cualquier circunstancia te llama para  saber si se te ofrece algo, ese que  cuando te ve te da un abrazo sincero,  ese que cuando te ve le da gusto  saber que existes).
Apreciar  las cosas que tienen  valor VERDADERO!, no material, no físico  necesariamente”. Pienso que a este concepto  bien le puedo añadir una reflexión que  me regaló mi madre:

          “El Éxito no tiene que ver con lo que mucha gente se imagina.
No se debe a los títulos  nobles y académicos que tienes, ni a  la sangre heredada o la escuela donde  estudiaste.
No se debe a las dimensiones  de tu casa o de cuantos carros quepan  en
tu cochera. No se trata si  eres jefe o subordinado; o si eres  miembro prominente de clubes sociales.

No tiene que ver con el  poder que ejerces o si eres un buen  administrador
o hablas bonito, si las luces  te siguen cuando lo haces.
No se debe a la ropa,  o si después de tu nombre pones  las siglas deslumbrantes que definen tu  status social. 
No se trata de si eres  emprendedor, hablas varios idiomas,
si eres  atractivo, joven  o viejo.
El Éxito

 Se debe a cuanta gente te sonríe, a cuantas gentes amas y cuantos admiran tu sinceridad y la sencillez de
tu espíritu.
Se trata de si te recuerdan  cuando te vas.

Se refiere a cuanta gente  ayudas,
a cuanta evitas lastimar y  si guardas
o no rencor en tu corazón.
Se trata de que en tus  triunfos estén incluidos tus sueños.
De si tus logros no hieren  a tus semejantes.

Es acerca de tu inclusión  con otros,
no de tu control sobre los  demás.

Es sobre si usaste tu cabeza  tanto como tu corazón, si fuiste egoísta  o generoso, si fuiste arrogante o humilde,  soberbio o considerado, si fuiste exigente  o tolerante.
Es acerca de tu bondad, tu  deseo de servir, tu capacidad de escuchar  y tu valor sobre la conducta.

No es acerca de cuantos te  siguen si no de cuantos realmente te  aman. No es acerca de transmitir, si  no cuantos te creen si eres feliz  o finges estarlo.

Se trata del equilibrio de  la justicia que conduce al bien tener  y al bien estar. Se trata de tu  conciencia tranquila,
tu dignidad invicta y tu  deseo de ser más,
no de tener más,

¡ESTO ES EL ÉXITO!
Analiza estos pensamientos...

Un triunfador es
PARTE DE LA SOLUCIÓN.

Un perdedor es
PARTE DEL PROBLEMA.
Un triunfador dice:
Debe haber una forma mejor  de hacerlo. . .


Un perdedor dice:
Esta es la forma en que  siempre lo hemos hecho. No hay otra

Cuando un triunfador comete un  error, dice: Me Equivoqué,
y aprende la lección.

Cuando un perdedor comete un  error, dice: "No fue culpa mía"
y responsabiliza a los otros.
Un triunfador sabe que la  adversidad es el mejor de los maestros.

Un perdedor se siente víctima durante  las adversidades.
Un triunfador sabe que el  resultado de las cosas depende de sí  mismo.

Un perdedor cree que existe  la mala suerte.
Un triunfador enfrenta
los desafíos uno a uno.

Un perdedor rodea los desafíos
y no se atreve a intentar.
Un triunfador  se compromete,
da su palabra y la cumple.

Un perdedor hace promesas,
no se pone manos a la obra
y cuando falla sólo se sabe  justificar.
Un triunfador dice:
"Soy bueno, pero puedo mejorar".

Un perdedor dice:
No soy tan malo como otros".

Un triunfador sabe escuchar,
comprende y responde.

Un perdedor interrumpe y no espera
que llegue su momento de  hablar.
Un triunfador respeta a aquellos  que saben más y se preocupa en aprender  algo de ellos.

Un perdedor se resiste a  todos los que saben más y sólo  se fija en sus defectos.
Un triunfador consigue
"ver el bosque en su totalidad".

Un perdedor se fija sólo
en el árbol que le toca  plantar".
Un triunfador se siente responsable  por
algo más que por su propio  trabajo.

Un perdedor no se compromete
y siempre dice:
Hago mi trabajo y ya es  bastante.
Un triunfador trabaja mucho y  dedica más tiempo para sí mismo.

Un perdedor está siempre 
muy ocupado o muy cansado
y no tiene tiempo para los  suyos.
No importa que tan fuertes  sean tus creencias.



Si no usas tu sabiduría  para crear cambios
positivos sigues siendo parte  del problema,
no de la solución ....
Un triunfador como tú, comparte  este mensaje...

 A un perdedor el egoísmo lo ciega y no sabe compartir.

Carlos Slim  Helú