Carlos Slim Helú
El aconsejar es un oficio
tan común que lo usan muchos y lo
saben hacer muy pocos
¿Qué es el Éxito?
Para todos aquellos que han
alcanzado el éxito y para quienes estamos
en el camino para alcanzarlo.
En la entrevista sobre el
éxito que le hace Issac Lee, de
la revista PODER, al Destacado Mexicano
Carlos Slim Helú, este dice:
“Yo creo que el éxito no está en lo económico.
Yo creo que una persona no
es de éxito porque le va bien en
los negocios o le va bien profesionalmente
o saca 10 en la escuela.
Creo que eso es lo que
menos vale. Lo que vale es tener
los pies en la tierra, el concepto
de la familia, los amigos (Pero los
verdaderos amigos, ese que cuando te recuerda
te llama, cuando sabe que estas mal
en cualquier circunstancia te llama para
saber si se te ofrece algo, ese que
cuando te ve te da un abrazo sincero,
ese que cuando te ve le da gusto
saber que existes).
Apreciar las cosas que tienen
valor VERDADERO!, no material, no físico
necesariamente”. Pienso que a este concepto
bien le puedo añadir una reflexión que
me regaló mi madre:
“El Éxito no
tiene que ver con lo que mucha gente se imagina.
No se debe a los títulos
nobles y académicos que tienes, ni a
la sangre heredada o la escuela donde
estudiaste.
No se debe a las dimensiones
de tu casa o de cuantos carros quepan
en
tu cochera. No se trata si
eres jefe o subordinado; o si eres miembro prominente de clubes sociales.
No tiene que ver con el
poder que ejerces o si eres un buen
administrador
o hablas bonito, si las luces
te siguen cuando lo haces.
No se debe a la ropa,
o si después de tu nombre pones
las siglas deslumbrantes que definen tu
status social.
No se trata de si eres
emprendedor, hablas varios idiomas,
si eres atractivo, joven o viejo.
El Éxito
Se debe a cuanta gente te sonríe, a cuantas gentes amas y cuantos
admiran tu sinceridad y la sencillez de
tu espíritu.
Se trata de si te recuerdan
cuando te vas.
Se refiere a cuanta gente ayudas,
a cuanta evitas lastimar y si guardas
o no rencor en tu corazón.
Se trata de que en tus
triunfos estén incluidos tus sueños.
De si tus logros no hieren
a tus semejantes.
Es acerca de tu inclusión con otros,
no de tu control sobre los demás.
Es sobre si usaste tu cabeza
tanto como tu corazón, si fuiste egoísta
o generoso, si fuiste arrogante o humilde,
soberbio o considerado, si fuiste exigente
o tolerante.
Es acerca de tu bondad, tu
deseo de servir, tu capacidad de escuchar
y tu valor sobre la conducta.
No es acerca de cuantos te
siguen si no de cuantos realmente te
aman. No es acerca de transmitir, si
no cuantos te creen si eres feliz
o finges estarlo.
Se trata del equilibrio de
la justicia que conduce al bien tener
y al bien estar. Se trata de tu
conciencia tranquila,
tu dignidad invicta y tu
deseo de ser más,
no de tener más,
¡ESTO ES EL ÉXITO!
Analiza estos pensamientos...
Un triunfador es
PARTE DE LA SOLUCIÓN.
Un perdedor es
PARTE DEL PROBLEMA.
Un triunfador dice:
Debe haber una forma mejor de hacerlo.
. .
Un perdedor dice:
Esta es la forma en que
siempre lo hemos hecho. No hay otra
Cuando un triunfador comete un
error, dice: Me Equivoqué,
y aprende la lección.
Cuando un perdedor comete un
error, dice: "No fue
culpa mía"
y responsabiliza a los otros.
Un triunfador sabe que la
adversidad es el mejor de los maestros.
Un perdedor se siente víctima durante
las adversidades.
Un triunfador sabe que el
resultado de las cosas depende de sí mismo.
Un perdedor cree que existe
la mala suerte.
Un triunfador enfrenta
los desafíos uno a uno.
Un perdedor rodea los desafíos
y no se atreve a intentar.
Un triunfador se compromete,
da su palabra y la cumple.
Un perdedor hace promesas,
no se pone manos
a la obra
y cuando falla sólo se sabe
justificar.
Un triunfador dice:
"Soy bueno, pero puedo mejorar".
Un perdedor dice:
No soy tan malo como otros".
Un triunfador sabe escuchar,
comprende y responde.
Un perdedor interrumpe y no espera
que llegue su momento de
hablar.
Un triunfador respeta a aquellos
que saben más y se preocupa en aprender
algo de ellos.
Un perdedor se resiste a
todos los que saben más y sólo se fija en sus defectos.
Un triunfador consigue
"ver el bosque en su totalidad".
Un perdedor se fija sólo
en el árbol que le toca plantar".
Un triunfador se siente responsable
por
algo más que por su propio
trabajo.
Un perdedor no se compromete
y siempre dice:
Hago mi trabajo y ya es bastante.
Un triunfador trabaja mucho y
dedica más tiempo para sí mismo.
Un perdedor está siempre
muy ocupado o muy cansado
y no tiene tiempo para los
suyos.
No importa que tan fuertes
sean tus creencias.
Si no usas tu sabiduría
para crear cambios
positivos sigues siendo parte del problema,
no de la solución ....
Un triunfador como tú, comparte
este mensaje...
A un perdedor el egoísmo lo ciega y no sabe compartir.
Carlos Slim Helú